El arte puede y debe encontrase en todas partes. Así ocurre en el metro de Nueva York. Estaciones, pasillos, vestibulos... suelen estar adornados por bellísimos mosaicos. Se trata de dar oportunidades a jovenes, y no tan jovenes, creadores que encuentran en este universo subterráneo un lugar idóneo para darse a conocer.
1- The Return of Spring. 2001. Jack Beal.
Linea: 1. Calle 42.
2- Signs of Life. 2000. Jackie Chang.
Linea: G. Metropolitan Avenue.
3- Harlem Timeline. 1995. Willie Birch.
Linea: 2. Calle 135.
4- Saturday on 110th Street. 1996. Manny Vega.
Linea: 6. Calle 110.
5- Subway Riders. 1950. Ralph Fasanella.
Linea: E. Calle 53.
Esto es el arte más democrático.
ReplyDeleteUn saludo.
en sevilla, donde vivo, la obsesión por la pulcritud en las paredes hace que casi cualquier creación callejera sea tachada de acto vandálico. Poco a poco los chicos de los sprays se van haciendo con espacios que adornan y les sirven como vía de expresión. A mi me gusta ver todas esas expresiones de talento a veces y de desatino otras muchas. Tenemos que exigir espacios públicos para la expresión.
ReplyDeleteEn Nueva York desde Haring ha pasado mucho tiempo y esto ya se ha hecho habitual para el ciudadano. Sigamos la senda.
gracias harry-o